Los conciertos que faltaban del 2015

Bueno, amiguitos y amiguitas, como hace más de un año que no damos la brasa con ningún post, hoy lo voy a contar todo junto, para ahorrar tiempo seré breve (pero intenso).

27 de Agosto de 2015: Después de unas merecidas vacaciones veraniegas, reanudamos nuestra actividad terrorista volviendo a hacer conciertos. La victima en este caso fue el restaurante Rustik, ubicado en del Port de Mataró.

Noche estupenda, buen ambiente familiar, tapas de rechupete y la música de la fantástica Secta Solar, como no.

10 de Septiembre de 2015: Se estaba acabando el verano y necesitábamos playita asina que cargamos las furgonetas y pusimos rumbo a la Costa Brava. Paradita en Viladesens para comer y de paso visita a nuestra pianista de estudio Elena Montané que recién se nos ha vuelto neo-rural y mamá para rematar.

Como ya viene siendo habitual en los días que tenemos concierto, amenazaba lluvia tormentosa, en realidad existen dos fenómenos constantes en nuestro histórico de bolos, la lluvia y los partidos de fútbol de máxima expectación. La cuestión es que la idea era realizar la actuación al aire libre al ladito de la playa, en lugar bucólico e inspirador pero el promotor del evento no lo tenía claro, y nos buscó una alternativa, un polideportivo cubierto, el polideportivo más feo de todo el Alt Empordà. Fuimos todos a verlo y se nos cayeron los huevos al suelo, era hora de rezar.

Nuestras suplicas fueron escuchadas por los dioses y el cielo se despejó, es lo que tiene tocar en una Secta Solar. Salió el sol y nos fuimos corriendo para la playa para reafirmar nuestras intenciones.

El sitio en cuestión era una escuela de kite-surf llamada Kite experience, un lugar precioso. En seguida vino el anfitrión, Sergi y nos recibió con los brazos abiertos. Empezamos a montarlo todo inmediatamente, bueno inmediatamente tampoco, primero unas cervecitas y luego a trabajar (sin stress).

El significado de la party, creo que era un cumpleaños doble de la pareja del Sergi y de su hermana, que cumplian años el mismo día, chicas muy simpáticas de las cuales, me gustaría pero no, no recuerdo sus nombres.

En definitiva, mucha fiesta, mucho ambiente, muchas crepes y muchísimo alcohol. Acabamos en la ribera de un riachuelo montando una jam de colocados, pura vida.

Al día siguiente despertar legañoso, carajillos en el poblado y baño en la playita. A por el siguiente!!!

3 de Octubre de 2015: Vermutazo en el bar Makinavaja. El templo de las tapas en el Raval, liderado por el compañero Leandro, lugar curioso donde los haya, con un ambiente que te hace sentir como en casa y ambientado en los comics de Maki Navaja del dibujante Ivà.

Bueno, en realidad el local es un local muy normalito, un bar, como cualquier bar, pero hay un algo en el aire que lo hace especial, (quizás los aromas del vermuth en mi cabeza).

No fue un concierto multitudinario, bueno en realidad no sabemos lo que significa “concierto multitudinario”, pero estuvo bien, unas 25-30 personas estuvieron gozando de nuestras melodiosas armonías vocales y nuestra entregada técnica instrumental, pero sobretodo devorando las deliciosas albóndigas con tomate del Chef.

Y para acabar, como no, nos quedamos a comer allí de gorreo, como marcan los cánones del buen vividor. Salut!!

18 de Octubre de 2015: De vuelta a la Gran Bodega Saltó, hemos tocado tantas veces allí que parecemos parte del decorado, por lo surrealista.

Nada digno de mención en este concierto, como siempre lleno hasta los topes, el vermuth casero es de lo más y un montón de niños pequeños revoloteando por la sala, es lo que tiene tener cierta edad, que sin saber como ni porqué, se te llena la vida de niños.

Así pues empezamos el concierto con algunos Standard infantiles, “Sol Solet” el “Gegant del pís” y alguna más que no recuerdo.

Agradecerle a Xavi por las estupendas fotos en blanco y negro que nos hizo, parecemos músicos de verdad y todo, jejeje.

Y acabamos amorrados a unas medianas y a unas magníficas tablas de embutidos ibéricos y quesos, gentileza de los simpáticos técnicos en restauración que allí habitan. Hasta pronto bodeguita!!

8 de Noviembre de 2015: Otra Bodega, ahora empiezo a comprender porqué dicen que hacemos “música de Vodeguil”.

La bodega en cuestión se llamaba “Bodega la Riera”, y estaba ubicada en el paseo Vallcarca, bueno, estaba y me imagino que sigue estando, claro.

 

Divertido lugar ácrata con un toque anacrónico muy especial. Quedamos para desayunar allí mismo, tremendos bocatas, ahora, eso sí, con la calma. Es lo que tiene no ser esclavo del capitalismo, que el trabajo te lo tomas con otra filosofía.

Regentaba el local un caballero de nombre Domingo…o Plácido? No recuerdo muy bien ahora mismo. Pero bueno, la cuestión que nos trató de puta madre, todo fueron facilidades y todos éramos camaradas.

La banda sonora que inundaba el garito era espectacular, cánticos de la guerra civil española en versión original, imagino que del bando republicano, claro…si no malo.

La verdad que el concierto fue sumamente divertido, contamos con la participación inestimable del “colgao” de turno, aborigen de la zona, imagino, y estuvimos a punto de contratarlo como animador oficial de la banda, por que realmente era un profesional del jolgorio.

A parte de eso, todo discurrió en la línea que debe discurrir cualquiera de nuestros conciertos, fiesta y francachela para todos.

Abusando de la confianza que nos caracteriza, ya nos quedamos a comer allí, unos super-bocatas de diseño, tipo Ferran Adrià, pero en mejor. Vino bueno (es lo que tiene tocar en bodegas), cervezas, carajillos, copazos y cubatas al por mayor. Teníamos la intención de pagar, de verdad, aunque fuera algo, pero no nos dejaron pagar nada y encima para postre, ¡Nos pagaron el bolo! Hasta siempre camaradas!!

23 de Diciembre de 2015: Kromschroeder, ahí queda eso. Para que no se diga que no somos una banda

versátil. Pica-pica de navidad de la empresa, donde casualmente, trabajamos Carlos y yo desde hace casi 30 años. Recibimos una oferta que no podíamos rechazar, tocar para nuestros “queridos compañeros de trabajo”.

Al ser un día laborable (para algunos), Iván no pudo participar en este bolo, así que recuperamos la formación original y recuperamos viejos temas de nuestros inicios.

Este era un concierto comprometido, sobretodo para Carlos y para mí, ya que si la cagábamos nos lo iban a recordar toda nuestra puta vida, cada día.

Pero, que cojones, nosotros semos tipos valientes y saltamos al ruedo sin miedo, engalanados con nuestras mejores galas obreras y alé alé, todo el mundo a bailar.

Ciertamente me reí muchísimo, una extraña experiencia que nos salió rentable. Ya casi tenemos para nuestro segundo disco. Nos vamos al estudio, gracias Kromschroeder!!!!

 -Jordi-